
Por otro lado, el cinismo y el descaro con el que actúan las autoridades del gobierno de turno llegan a niveles en que rayan con lo absurdo y lo risible (por no llorar), juegan a la democracia electorera, a los negocios y convenios personales, que para nadie que al menos “le pegue una ojeada” a los periódicos nacionales resultaría una sorpresa. Y en medio, de este contexto, que se encuentra cada vez más vulnerable por los Tratados de Libre Comercio firmados y negociados sin que la ciudadanía tan siquiera se percate, donde cada vez está más difícil la cosa, el acceso a un trabajo digno, a una educación de calidad y a una calidad de vida digna en general, podríamos pensar ¿Qué papel juega la educación pública ante toda esta situación?
Esta pregunta como punto de partida implica reconocer la dimensión de la lucha que debemos dar. El papel que históricamente han jugado las universidades estatales, y en nuestro caso la UCR ha sido de confrontación y resistencia en la academia y en la calle, no el silencio por el prestigio y la legitimación que crean los medios de comunicación que nos atacan con más fuerza desde hace poco más de dos años desde la violación a la autonomía universitaria y cuando se firmó el préstamo con el Banco Mundial.
Permanecer dentro de una universidad pública cada vez es más complicado, debido a los recortes presupuestarios que el estado ha hecho con respecto a la educación. Para el próximo año, el FEES será de apenas un 4.5%, lo cual afectará el funcionamiento interno de la universidad, por lo que, las universidades y el gobierno para poder solventar los gastos firmaron un préstamo con el Banco Mundial de 200 millones de dólares. No obstante, sabemos bien que el banco mundial para poder hacer un préstamo tiene sus requisitos y en este caso la Autonomía universitaria está en peligro, por lo que, el préstamo no es gratis. Además, ya empezamos a observar dentro de la universidad uno de los grandes cambios después de la firma del FEES, pues, se ha estado divulgando por el campus la nueva REFORMA DE BECAS.
Sabemos muy bien que en Costa Rica también ha llegado el Plan Bolonia y, por consiguiente, se busca que los y las estudiantes universitarios permanezcan más dentro de la universidad y que duren menos años en sacar una carrera universitaria (lo cual es muy parecido al funcionamiento de las universidades privadas). Poco a poco hemos visto como la universidad que se caracterizaba por ser una universidad humanista más bien se ha ido haciendo cada vez más técnica, además, cada vez se privatiza más.
Con todo esto, podemos ver que con este modelo país, las capas estudiantiles han sido infiltradas por políticas neoliberales que han ido atacando paulatinamente las conquistas y garantías logradas a los años. El último ataque impulsado por la cúpula de liberación nacional y su representante civil Laura Cochinilla, ha sido el veto al proyecto de ley fotocopiando para estudiar. Nosotros y nosotras no estamos de acuerdo con la propiedad intelectual, esto debido a que consideramos que el conocimiento producido por los y las otras debe ser accesible a todos y todas. El conocimiento producido por un individuo no se produce únicamente gracias a él o ella solamente, es gracias a la comunicación con los y las otras, y al conocimiento histórico acumulado, por lo que son producciones colectivas y no individuales para que sean propiedad de una sola persona. Por consiguiente, consideramos que como estudiantes tenemos el derecho de fotocopiar cualquier material que sirva para fines educativos aunque también consideramos que las demás personas que no son estudiantes también tienen ese derecho.
Por ende es de suma importancia que como movimientos, colectivos, activistas independientes, partidos políticos y personas cercanas a los y las estudiantes, nos organicemos de una forma autónoma y horizontal (vectorial) para empezar a combatir las políticas neoliberales que se han sumergido en la universidad y de esta forma buscar un modelo universitario más popular y equitativo. Autónomo porque no podemos seguir dependiendo de los aparatos burocráticos para que luchen por nosotras, sino que es desde el mismo estudiantado, los y las afectadas directas, quienes tiene que luchar. Horizontal, ya que, no podemos dejar que las decisiones sean de forma centralistas, sino, que todos y todas tenemos algo que decir, algo que aportar, porque nuestras voces son colectivas.
Por lo que:
Repudiamos categóricamente el veto que hace Laura Chinchilla, en complicidad con las cámaras empresariales y otros grupos empresarios, a la ley Fotocopiando para Estudiar.
Abogamos por la lucha reactivación de la lucha por el FEES, así como por una educación, gratuita, inclusiva y critica.
¡Rechazamos cualquier intento de figurismo politiquero y del uso de estas luchas con fines proselitistas!
¡Luchamos con conciencia y dignidad!
Colectivo Espora.
Colectivos Autónomos.